sábado, 2 de enero de 2016

MESITA

Esta es una mesita adquirida en un mercadillo de segunda mano del barrio.Creo que es de madera de nogal y estaba bastante tratada contra carcoma ya que tenía las marcas de los agujeros sellados con una pasta rosa.El barniz (pienso que más bien es lacado) de la madera estaba algo deteriorado.Aunque no me desagradaba la mesa en su conjunto, mentalmente ya la había transformado con colores Chalky de modo que cada vez que la veía, más triste me parecía su aspecto real. El primer reto fue saber qué hacer con ese lacado que tenía de origen la mesita. ¡A saber cuantas capas tenía! y si la pintura Chalky quedaría bien fijada. Ante la duda, decidí aplicar un tapaporos (Sealer) para evitar hacer estragos en mi primera incursión Chalky.
Posteriormente apliqué una capa de blanco antiguo como base a toda la mesita y después de comprobar que obtenía una buena fijación, apliqué una segunda mano. Luego opté por un azul horizonte aplicado en la estructura de mesita y en dos cajones.Previamente enceré con un cabo de vela aquellas zonas en las que realizaría un decapé con lija fina.
Pinté con amarillo mostaza dos cajones y de blanco antiguo los otros dos pintados previamente de azul.Sobre los cajones blancos realicé decapé para dejar a la vista el azul de modo sutil. Sobre los cajones color mostaza utilicé técnica de pincel seco usando en uno el color azul y en otro el blanco para conseguir un efecto desgastado rompiendo la uniformidad del color. Por último apliqué una cera incolora por toda la superficie de la mesita y cajones para protegerla de la humedad sobretodo. Y así me quedó la transformación de esta mesa que ahora parece que tenga luz propia!

viernes, 1 de enero de 2016

...y todo se hizo Chalky

La aventura de Chalkygirl empezó como casi todo en la vida, por casualidad (aunque siento que nada es casual en la vida) o accidente si consideramos como tal, el ir tropezando con el camino. Literalmente todo comenzó con un tropiezo que me mantuvo inmóvil varios meses y me permitió comenzar a pintar y trabajar con Chalky. Supuso una terapia muy enriquecedora para mí que permitió liberar mi imaginación y calmar la mente y el espiritu cuando más lo necesité.
He pasado meses practicando cada día Chalky con los muebles de casa y otros encontrados, transformando cada pieza en algo mágico e irrepetible porque una cosa es cierta y es que no puedes repetir dos veces el mismo esquema creado, ya que cada pieza supone una nueva inspiración de combinaciones de colores y texturas, así lo siento yo.
He querido crear este blog para compartir algunas de las cosas que he ido creando, y asombra ver que a medida que vas transformando los objetos, te haces consciente de que de algún modo les estás dando vida....antes eran tristes mesas, sillas y muebles abandonados, olvidados y se convierten en el centro de tu salón, de tu estudio, de tu hogar y están ahí dándote la bienvenida cuando abres la puerta y entras en tu universo de confort.
Descubrí el Chalky brujuleando por la red cuando pretendía pintar un banco-arcón de la terraza que estaba siendo devorado por el sol y la sal.Quería salvarlo, protegerlo, pero no quería pintarlo de cualquier manera ni aplicar la paleta de colores convencional, es entonces cuando gracias a todas las personas que comparten sus experiencias y proyectos en la red, descubrí los colores mágicos de Chalky, su especial forma de trabajarla, su textura y la sostenibilidad con el medio por su ausencia de tóxicos y el respeto por la madera ya que no precisa de agresivos decapados previos para ser aplicada.
Como agradecimiento a todo lo aprendido de blogs y webs quiero compartir los resultados y experiencias por si puede servir de apoyo a otras personas que como yo estén navegando perdidas buscando algo que necesitan saber y todavía no han encontrado.

Gracias a todos!!